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La caja de zapatos

Un pequeño paso para los aitas...

y un gran paso para mí. Es una chorrada, pero desde que me saqué el carné (allá por septiembre) siempre que he conducido lo he hecho acompañada de mi hermano, mi ama o mi aita. Esa seguridad psicológica de "si voy con ellos, no pasará nada malo". Chorradas de los L, ya sabéis. Pues hoy ha sido el día D. Ya vestida para ir a trabajar he entrado en la cocina para tomarme el café que hace que en estos momentos pueda escribir. Bebiéndolo a sorbitos pequeños porque quemaba, de repente en el silencio se ha oído la frase "Bueno, hoy vas tú sola a trabajar en coche. Llámanos cuando llegues".

Buah, no puedo explicar la satisfacción que he podido sentir en ese momento. Por fin mis progenitores me daban un voto de confianza y superaban su propio miedo a que la txiki de la familia montara en un vehículo motorizado sola. Un bravo a mis aitas porque sé que su propio pequeño paso, les ha echo avanzar 10 metros.

2 comentarios

larlar -

kuando vaya a donosti me llevarás al monte en coche ehh

Maitxu -

¡Q buena Irato! ¿¿Y la satisfacción que supone conducir tu solita en el coche?? Con tu música, cantando a pleno pulmón... DISFRUTALO!!